Tercer Parte del Viaje: La Carretera

Author: Devendrah / Pequeñas memorias: , ,

 "Al caer en la inconsciencia del sueño, el alma escapa a encontrarse con otras almas. Se juran y prometen volver a encontrarse, esta vez, acompañadas de sus cuerpos conscientes" -D.




¿Acabará pronto? ¿Acabará algún día? Día. Aquí parece no haber ni sol ni luna, ¿cómo decir si ha pasado un día de viaje, o dos, o veinte? No me interesa a fin de cuentas. No habrá retorno y la carretera que recorro parece deslizarse por sí sola a velocidades vertiginosas. Es un río de pavimento que hago hervir con el sol que imagino. Suelen decir que a tientas todo transcurre de manera más lenta. Mienten, todos mienten. Y mienten incluso en sueños.
Por extraño que parezca he habitado en sueños ajenos. La hilaridad que me provoca la reacción del soñador al verme dentro de su subconsciente es absolutamente hermosa. Ahora me divierto observando sueños disparatados que asoman por las puertas a los bordes de la carretera. Cada uno posee una pizca de realidad que se mezcla hasta casi desaparecer con los deseos más ocultos, las pasiones negadas, los miedos, ansias y mensajes subliminales. Todo se adereza con ficción televisiva, acción literaria y drama de teatro. Las puertas se extienden hasta donde alcanza la vista; algunas contienen pesadillas y puedes escuchar los gritos de quien sueña, incluso hasta la carretera. Nunca me agradó tener pesadillas y prefiero evitar esos umbrales.
De pronto me pregunto qué sucederá con aquellos sueños cuyos dormidos, al despertar, concluyen que no han soñado en absoluto. ¿Serán puertas escondidas? ¿Obscuridad?
Continúo mi camino, el viaje en el que todo papel protagónico, antagónico, secundario e incidental se resume en mi. No hay problemas causados por alguien más. Estamos juntos mis necesidades nulas y yo.
Ahora la carretera ha disminuido la velocidad de manera abrupta, así me doy cuenta de que no soy yo quien avanza, si no ésta la que me hace avanzar.
Puedo observar con detenimiento un sueño en especial. Es una mujer la que sueña. Dentro de la puerta se sueña hombre. Se mira al espejo. Como en una película, se ve de espaldas frente al cristal. A pesar de ser un hombre el reflejo muestra otra mujer. No es ella, no es él. Obscuridad.
Al parecer la cuestión quién soy le ha causado demasiada impresión y decidió despertar. Tal vez tiene miedo de preguntarlo, o averiguarlo. La puerta se cierra detrás de mi.

Miro al frente y vislumbro un punto luminoso. Sin darme cuenta he hecho anochecer. El punto comienza a hacerse mayor lentamente, pero aún me queda tiempo para echar un vistazo a otra puerta.
Introduzco la mano que sostiene mis ojos y espero a que se forme la imagen.

Es un sueño nítido de colores estridentes. Aún no sé si el soñador es un él o una ella. Camina por el pasillo, que es rojo de piso a techo, silencioso. Hay puertas a ambos lados, más pasillos con más puertas y esquinas que no parecen tener lugar ahí. Colgados en las paredes, unos cuadros estrambóticos y una lámpara sobre ellos.
Ahora sé que es un él. Alarga la mano para abrir una de las puertas y luego caer en un inmenso vacío. Aterriza frente a tres umbrales de feria con cortinas verdes, con un número amarillo en el centro, y marcos bicolor. Hay un guardia por cada umbral, sus trajes consisten en pantalón y saco a rayas anchas y monocromáticas. Todo parece torcido, incluso ellos. Una música de carrusel inunda el espacio, es cómico cómo las ferias pueden ser divertidas y aterradoras al mismo tiempo. Ahora el hombre debe hacer una decisión, una de las cortinas. ¿Un premio, quizás, aguarda detrás? Siente terror.

Mis observaciones son interrumpidas por un alto repentino de la carretera. Saco con cuidado mis ojos y veo que el punto luminoso se volvió una caverna de luz. He llegado a mi primer destino en este viaje. Cierro el estuche de las impresiones y me preparo. Es hora de disfrutar del espectáculo.

Segunda Parte del Viaje: La Partida

Author: Devendrah / Pequeñas memorias: , ,

"Se busca gente con tenacidad para comenzar peregrinaje masivo a la libertad irreal. Interesados, para identificarles, favor de usar la corbata de la indiferencia inteligente ante lo dictado por la sociedad " -D.





Todo dispuesto. Unas sogas, una navaja bien equipada, pastillas por si cualquier cosa. El ánimo a flor de piel, las palabras grabadas en la mente. En el momento menos indicado me viene a la mente la monja. Venía a enseñarle a mamá a hacer galletas y rompope, platicaban horas en la cocina con el sol de media tarde entrando por la ventana dándole un toque dulzón a las cortinas de encaje y la mesa con mantel de cuadritos. El aroma de la repostería en el horno y las palabras ininteligibles de la hermana de la Santa Caridad. Los pájaros cantando y la tranquilidad acogedora de la cocina inundan mi cabeza en éste, el peor momento para sentimentalismos. ¿Qué habrá sucedido con la monja?
Pero terminó. No tengo ya los cuatro años con que contaba entonces. No creo más en las palabras de la monja cuyo significado he comprendido y desechado. Mamá ya no hace galletas y fuma todo el día frente al televisor sintonizado en comedias de quinta. ¿Qué sucedió con esa monja? ¿Qué sucedió con la tranquilidad que ella traía al hogar? Aún me lo pregunto.
Es hora. No habrá despedida. Con todo dispuesto comienzo éste, el viaje que cambiará algo. Lo sé. Con mi partida quizás modifique la rutina sedentaria de mamá. Quizás olvide el hedor a nicotina y alquitrán tan penetrante. Tal vez el olor dulce de las galletas lo remplace y regrese entonces el ensueño de las tardes soleadas y también la inocencia y amor con que creía a pies juntillas todo lo que la monja decía.
Una última mirada al espejo. A donde voy no los habrá. No hay necesidad de ellos, todo es más simple, menos vano. Una última mirada al espejo para recordar quién soy, quién fui y cómo era este yo antes de irse.
Vuelven a mi cabeza las palabras de la monja. ¿Debo honrar a mis padres? ¿Al padre inexistente? ¿A la madre ausente? Lo pienso un momento, me doy cuenta de que si sigo reflexionándolo me arrepentiré y mi viaje pasará a ser un sueño, me quedaré aquí a vivir la monotonía.
Todo dispuesto. Recuerdo que la última decisión importante que tomé entre estas paredes fue la de qué juguete pedirle a los Reyes Magos, todas las demás fueron hechas en mi estudio, mi único escondite. Importancia. ¿Qué es si no un orden autoritario que nos empeñamos en darle a las cosas? ¿De qué sirve el orden al final de cuentas? La Naturaleza no tiene un orden estricto. Toda mi vida se basó en un orden absurdo que por fin me he dado cuenta que debo romper. Ahora. Hoy.
El adiós es mental. La partida es real.

Primera parte del Viaje: La Nota

Author: Devendrah / Pequeñas memorias: , ,

"Calmad vuestras ansias, que el Inicio de este camino es el Final de muchos otros" -D.



...Y la ansiedad te pone la mano tan temblorosa que deslizas la pluma y las letras fluyen ininteligibles. Luego tu estrés se calma, tus nervios se relajan y tu respiración se vuelve acompasada. Escribes tus deseos, tus anhelos, dejas parte de lo que resta de tu alma sobre ese trozo feo de papel, tu papiro improvisado, esa nota.
La dedicas. Dudaste sobre cómo iniciarla, era un momento decisivo y sabes que no podías cometer errores a esas alturas. Una vez que lo lograste el resto siguió fluyendo de manera natual y cuando llegaste al final sabías que te habías arrepentido.
Empacas tus memorias, tus sentimientos, cierras el esctuche y comienzas el mejor viaje que alguien puede hacer jamás. Cuando encuentren la nota quizás se pregunten el por qué y lloren. Pero no sabrán que todo fue cuidadosamente planeado tal como siempre quisieron todo. Hasta el más mínimo detalle fríamente calculado para evitar imprevistos.
En el camino te preguntarás si el viaje lo inciaste al nacer, si fue una decisión correcta el iniciarlo antes de tiempo, si volverás. La cosa es que la respuesta la encontrarás cuando alcances la parada final, la equis en el mapa que da fin a tu línea punteada. Y entonces sabrás y no le dirás a nadie para que cada uno viva su propia experiencia. No quieres arruinar la diversión. El viaje apenas comienza.





"Disculpen ustedes la falta de... profundidad de la fotografía. Fue una elección rápida" D.

Única Dosis

Author: Devendrah / Pequeñas memorias: ,

Te pienso.
Y te miro en el cielo,y
en el café frío a mi lado.
Y la música se me pudre cuando
pienso en que te fuiste.
¿Por qué te pienso?
Y muero por dejar de morir
mientras siento que el aire frío
y tu fantasma entran por la ventana.
Te pienso.
Y no quiero pensarte mas que
cuando te tenga enfrente.
¿Y todo esto por qué?
¿De dónde me salió lo cursi?
¿Lo nostálgica?
Y te pienso, y te re-pienso, carajo.
No digas nada, es un secreto ésto
que te escribo.
No digas nada, te pienso.
Y no te fuiste, te llevé.
No digas nada, te pienso.
Y tu fantasma
no es el que entra, soy yo.












"¿Qué? ¡Sí! Puedo ser cursi. Es sólo que cuesta bastantes cafés, unas noches sin dormir y una persona interesante.. Pero disfruten, porque pasará mucho tiempo antes de que vuelva a hacer esto." -D.