La Censura Mata

Author: Devendrah / Pequeñas memorias: , ,

¿Dónde quedaron las ganas de luchar? ¿Esas fuerzas que nos hicieron vomitar inconformidad, firmar tratados, planear una revolución? Esas fuerzas que nos hicieron desear el cambio ¿Dónde están? -D.



Se ha vendido el símbolo. El lábaro patrio se prostituyó, fue regalado en los festejos del Bicentenario y lo ahorcamos en las ventanas sin saber su historia, su por qué.
Que no importe si el mundo se voltea, si el crimen se organiza mientras el gobierno hace al revés, o si son gemelos, o si la derecha se une con la izquierda.
La bandera no es solamente un trozo de lienzo tricolor con una estampita en el centro, es la cara de todos enmedio de las otras miles de caras existentes en el mundo, diferentes colores, diferentes lienzos, escudos, idiomas.
Es una bandera que se tiñe de sangre no sólo cada vez que un político roba, asesina, encubre y miente al pueblo mientras sonríe a las cámaras con el pelo engomado; si no también cuando se amenaza a alguien que dice la verdad, por decirla. Cuando el maestro enseña lo que le dicen que enseñe, y no lo que sabe que debe enseñar. Cuando se contamina, cuando eres corrupto y aún así tienes la cara de criticar a los otros. Cuando dices que eres mexicano solamente porque lo dice tu acta, y crees que realmente tienes doscientos años de ser libre, aunque tengas apenas diecisiete. O dices que lo eres después de gritar "Viva México, cabrones" después de la voz de la falsedad en el estrado, bebes tequila y conduces medio ebrio. Cuando hablas sin saber. La bandera se tiñe de sangre cuando uno no hace lo que debe hacer.
 Pero la sangre se lava.
Deben para la opresión, los falsos símbolos del nacionalismo; la censura y la amenaza. Deben dejar de existir los pies en el cuello que recomiendan que te calles, y los que callan.
Aprendamos de nuestros hermanos, de la paz, de las ansias de cambio. Tomemos las calles con palabras, actos pacíficos. Tomemos las mentes haciéndolas razonar. ¡Que comience la libertad de expresión! ¡Que se abran los ojos que aún no despiertan!
¡Demos la cara! Que nuestra bandera deje de representarnos ahorcada en el asta sucia de una democracia dudosa, y que seamos nosotros quienes la representemos a ella.